Canción oscura
No me gusta el humor negro. Creo que hay que observar la muerte y las discapacidades con todo lo que tienen de trágico, y no intentar minimizarlas con algun chiste ingenioso. Sin embargo la realidad, la implacable realidad, se ocupa de lanzarnos a la cara, con toda su inocencia, un feroz chiste de humor negro.
En el subterráneo (si, pasan muchas cosas en el subterráneo) veo con frecuencia a una pareja de ciegos limosneros. Ella camina delante con el brazo extendido, portando un vaso metálico. El carga detrás un acordeón, que ejecuta medianamente bien, y canta. Ambos tienen los ojos firmemente cerrados. El tiene la deferencia de ir renovando su repertorio. A pesar que ya los vi muchas veces, siempre la canción que interpretaba era distinta. Pero el otro dia me sorprendió con este clásico:
Que bonitos ojos tienes
debajo de esas dos cejas,
debajo de esas dos cejas
que bonitos ojos tienes.
Ellos me quieren mirar,
pero si tu no los dejas,
pero si tu no los dejas
ni siquiera parpadear.
Los pasajeros estaban silenciosos, probablemente absortos en oscuros pensamientos. Solo se oia el ruido de las moneditas cayendo en el vaso metálico.