Pasá nomás, no te achiques
8 de julio de 2002
Hoy arranco con esta cuestión del sitio propio. Me largo, ni mas ni menos, y un poco «a ojímetro» (como buen argentino), a tratar de descular el cambalache discepoliano. Y espero, como dice nuestro Himno, que los libres del mundo me respondan.